2 mar 2016

Noches de Estocolmo

Esta noche ha marcado la diferencia entre todas las que llevo aquí. Aunque señalo que no son demasiadas. La visión de esas criaturas, invocadas por aquella persona a la que imagino un igual, no me produce escalofríos.

En realidad, fue emocionante salvar a Greguer. Pocas veces dejo ver mi verdadera naturaleza, sin embargo en esta ciudad me siento anónima aún sabiendo que no lo soy. Siento que mi verdadero ser está sediento de algo que desconozco. Ni siquiera sé cómo me veo ahora que estoy más corrompida que cuando llegué a este mundo. Lo bueno de esa consecuencia es que puedo usarla a mi favor para causar aún más pavor.

No fue difícil espantar al invitado no deseado en esa fiesta, en el cual no percibí gesto de horror. Cierto es que aquello que invocaba no era cualquier cosa. Pero tengo la sensación de que volveré a verle pronto.
¿Quién será? ¿Qué querrá?
Dentro de mí hay una intensa curiosidad que quiero saciar. Si nos encontramos de nuevo... si descubro sus intenciones, tendré que actuar en consecuencia.

No permitiré que nadie vuelva a romperme, que nadie me hiera. Sea cuál sea el precio a pagar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario