27 jun 2015

Oscuro

Aún persiste ese mal sabor en mi boca.
Sin darme cuenta, a veces me descubro acariciando mi cuello donde esa extraña criatura me mordió y dejó su marca. Ahora no queda nada, pero... ¿por qué lo hizo?
No puedo evitar tener un mal presentimiento, un miedo dentro de mí. Algunas ideas macabras se cruzan por mi mente, sobre lo que podría pasar. Pero las anulo.

Ese ser... oscuro como la noche con ojos claros como el día. Suena poético incluso decirlo así, pero en realidad daba terror con solo imaginar su existencia. Y yo lo encontré, no solo en mis sueños, sino en aquel bosque.
Dijo que provenía de la prisión que crearon los primeros. No sé lo que significa, temo que sea cierto que no hay ser en este mundo que pueda acabar con él.

Porque se fue, después de agradecerme el obsequio que más bien pretendía ser un ataque. Después de alimentarle, hacerle más fuerte... se fue de ese bosque.
¿A dónde? ¿Volveré a verlo? ¿Sembrará el caos y la oscuridad allá donde vaya?

Temo que así sea.
Y ese temor apenas me deja dormir por las noches.

25 jun 2015

Palabras que se consumen

Malos augurios. Criaturas de oscuridad, la naturaleza ella tanto ama se corrompe hasta hacer enloquecer a las bestias que habitan allí, una amenaza que se esconde y casi imagino que se reproduce con demasiada facilidad. Mientras ella sobrevuela los cielos intentando acabar con la amenaza a su manera, evitando así que su amigo queme hasta la última hoja, necesito pensar.

Ahora este papiro contiene mis pensamientos, para después, cuando obtenga consuelo o respuestas, ser también consumido.

Problemas y más problemas en cuanto a viajes. Si ella consigue paliar por completo aquello que está ocurriendo en el bosque ahora oscuro, podré marchar con mayor tranquilidad. Pero me hace estar intranquilo... ¿qué es? ¿Por qué se manifiesta así? ¿Tiene algún objetivo? ¿Qué pasará si la amenaza se neutraliza? ¿Están a salvo nuestros seres queridos? La misiva hacia Ethan ya está preparada, advirtiéndole de la forma más tranquilizadora que sé para que esté alerta. Como si no tuviera suficientes problemas de los que ocuparse, solo con los que comparte cargo y no inquietudes.

Tiene la libertad y los deseos para acabar con el que hubiera sido su yerno. Enfrentamientos con más personas poderosas de las que quisiera. Una mujer extraña y de intenciones no del todo claras a su lado. Un poderoso aliado e informador que se ha alejado de él para salvar su cuello. Y esta lista donde enumero nuestros problemas es aterradoramente larga.

Dioses, permitidme que esté equivocado y malinterprete este mal presagio. Vuestra sabiduría está por encima de todos nosotros, pero nuestra voluntad es fuerte para luchar por lo que amamos.

16 jun 2015

Desde que partió, las nubes no han dejado de azotar mis tierras. Pesadas nubes cubren mi cielo y también mis pensamientos. No sé cuanto tiempo más lo soportaré. Anunciaron hace días que de no tener novedades por mi parte, se presentarían en este maldito castillo. Un regalo, parecía en un principio. Y un favor a devolver que es demasiado grande para mí.

Contemplo con la mirada perdida como las gotas impactan y se deshacen en el cristal, frente a mí, mientras pienso. No paro de recordar su mirada. Al instante había perdido las fuerzas para luchar, cuando escuchaba de mis labios la verdad que había hecho por ocultarle. Ahora sentía lo mismo que ella. No tenía fuerzas para continuar con la farsa, ya desvelada, ni seguir accediendo a sus locas pretensiones. Podría desenmascararlos a todos, pero antes me atraparían para asesinarme. Debían de estar al llegar.

Tal vez podría ser el escudo para que ellos tuvieran tiempo de actuar. Estaban advertidos, a pesar de que ya la había perdido para siempre. Puede que no fuera lo que ella creía respecto a mis sentimientos, pero por los Dioses que la extraño a mi lado. Quizás fuera la mejor que pudiera hacer dadas las circunstancias. Tan solo yo, como en los otros tiempos. Tomando la espada una vez más para eliminar a nuestros enemigos en común. Ojalá no hubiera sido tan cobarde hasta este momento. Confío en que en algún momento, en la eternidad que me espera, encontrar algo parecido al perdón.